La familia X de BMW continúa con su proceso de renovación. Tras presentar los nuevos X3 y X4 y, sobre todo, tras lanzar al mercado el X2, ahora le toca el turno al buque insignia, al modelo con el que dicha sigla comenzó a rodar: el X5.
Como modelo de representación de la marca, en general, y de la gama de todocaminos, en particular, el nuevo X5 que llegará al mercado durante el mes de noviembre cambia en todos los sentidos. Una afirmación que puede chocarte al ver que su diseño es muy parecido al de su predecesor, pero que en realidad aporta un cambio significativo.
Comenzando por lo que no se ve a simple vista, el nuevo BMW X5 se sostiene sobre a nueva plataforma modular CLAR con la que no solo ha perdido peso, sino también ha crecido en tamaño. En concreto hablamos de un aumento de 3,6 centímetros a lo largo (hasta los 4,92 metros), 6,6 a lo ancho (llegando a los 2 m), y 1,9 a lo alto (con 1,74 m).
Si vamos a lo que se ve, destaca la enorme parrilla delantera de una única pieza que le confiere un aspecto más robusto e imponente. Los faros principales ganan protagonismo y ofrecen de serie la tecnología LED. En opción estarán disponibles otros láser LED adaptativos (novedad en la gama). La zaga gana en volumen, con unos faros inéditos en la marca, mientras que el lateral, con unos pasos de rueda más prominentes en los que ahora se pueden albergar llantas hasta de 22 pulgadas (parte de las 18).
Además de los acabados tradicionales, se suman otros dos acabados exclusivos con rasgos estéticos diferenciadores. Para los más aventureros se propone el xLine, mientras que para los conductores más Racing, el M Sport seguirá marcando su tendencia.
Visión digital
De puertas para dentro, el nuevo BMW X5 consigue algo que parecía difícil, aumentar la calidad general y, sobre todo, el espacio. Nuevos materiales (como las inserciones en vidrio) y ajustes perfectos dan la bienvenida a sus siete ocupantes (este elemento es opcional), con un salpicadero que está presidido por la doble pantalla digital de 12,3 pulgadas, una situada en el centro y con acceso a todas las funciones del vehículo, y la otra haciendo las veces de cuadro de instrumentos y cambiando de apariencia en función del programa escogido. La guinda la pone un Head-up Display mejorado, con mayor contraste e información.
Los ocupantes traseros, además de tener un mayor espacio tanto para las piernas como para la cabeza, contarán con elementos de confort destinados a hacer del viaje una experiencia placentera. Nos referimos a los asientos calefactados y ventilados, al sistema multimedia con monitor táctil de 10,2 pulgadas o al sistema de sonido Bowers & Wilkins, entre otros.
Si hablamos del maletero, este cubica 645 litros (5 menos que antes) a los que se accede mediante un portón eléctrico y con función manos libres, pudiendo llegar hasta los 1.860 litros cuando se abaten los respaldos posteriores.
Más campero
BMW ha anunciado, de momento, tres motores para esta generación del X5. Todos estarán turboalimentados, tendrán una arquitectura de seis cilindros en línea y contarán hasta con cuatro turbocompresores. Este es el caso del diésel más potente, el X5 xDrive M50d, que desarrolla una potencia de 400 CV y un par máximo de nada menos que 760 Nm. Para los menos exigentes, la gama arrancará con el X5 xDrive30d, con unos accesibles 265 CV y 620 Nm de par. En el otro lado de la balanza, aparece el único integrante de gasolina, el X5 xDrive40i de 340 CV y 450 Nm.
Todos se asociarán de serie a la caja de cambios automática Steptronic de ocho relaciones y a la última generación del sistema de tracción xDrive que, según la marca, es más eficiente a la hora de repartir el par entre ambos ejes. Además, cuenta con un bloque del diferencial trasero con control electrónico, mandado fuerza a la rueda que pierde tracción para conseguir un mayor agarre en todo momento.
En opción aparece la neumática M Professional con posibilidad de ajustar la altura y estabilización activa antibalanceo. Además, contará con un inédito paquete Offroad con programas específicos para circular sobre terrenos complicados, como rocas, arena, grava o nieve, cambiando en cada uno la gestión mecánica y la altura de la carrocería.
Y ya que mencionamos la seguridad, decir que este nuevo X5 estará disponible con un amplio elenco de asistentes y ayudas a la conducción, tales como el control de velocidad de crucero adaptativo con función Stop&Go, el asistente de protección ante colisiones laterales, el asistente de ayuda de evasión o la alerta en cruces. Igualmente, a nivel tecnológico, será el primer BMW en incorporar la llave digital que permitirá a su usuario abrir el coche mediante el Smartphone sin necesidad de tener la llave a mano.
Las primeras unidades del nuevo X5 ya han comenzado a ensamblarse en la fábrica americana de Spartanburg y, como decimos, las primeras unidades llegarán al mercado durante el mes de noviembre, aunque antes lo podremos ver más de cerca en el Salón de París.
