Llegará al mercado en verano. Desde que aterrizara la última generación del Ford Focus, los fans del compacto americano han estado esperando este día, aquel en el que la marca del óvalo presentara la versión más deportiva de la gama… hasta la espera del posible RS. Nos referimos al Focus ST.
Dos serán las motorizaciones disponibles, una diésel y otra de gasolina, para así llegar a un mayor público, pudiendo elegirse, además, tanto con carrocería familiar como con la tradicional de cinco puertas. En el caso de los Focus ST gasolina, estos vienen animados por el 2.3 EcoBoost que genera una potencia de 280 CV y consigue una aceleración de 0 a 100 km/h inferior a seis segundos. Según Ford, este bloque estrena un nuevo turbocompresor de geometría variable para optimizar así la entrega de potencia.
En cuanto a los Focus ST diésel, emplean el 2.0 EcoBlue que ya montan otros Ford pero con las pertinentes modificaciones (no dice cuáles) para que su potencia aumente hasta los 190 CV y el par máximo hasta los 400 Nm. De este motor, la marca no ha facilitado las prestaciones.
Lo que sí sabemos es que ambos se asociarán de serie a la caja de cambios manual de seis relaciones, aunque los Focus ST gasolina también podrán combinarse con la nueva automática de doble embrague y siete relaciones.
Bien diferenciado
Dinámicamente, Ford asegura que sus Focus ST han recibido una puesta a punto específica, con el objetivo de enfatizar su comportamiento deportivo. Entre sus novedades está la inclusión de una suspensión adaptativa variable que ofrece un tarado más duro en los modos de conducción más deportivos, Sport y Track; así como el montaje de un diferencial autoblocante delantero gestionado electrónicamente exclusivo eso sí del gasolina (el diésel se ‘conforma’ con un sistema de vectorización del par).
La carrocería familiar podrá contar con este último elemento pero no con la suspensión, ya que sus amortiguadores traseros ya ofrecen un tarado específico para soportar la mayor carga del maletero. Otro elemento común es, por un lado, el equipo de frenos, con discos delanteros de 330 mm, y por otro, los neumáticos de altas prestaciones como son los Michelin Pilot Sport 4S.
En el apartado estético, los nuevos Focus ST ofrecen paragolpes específicos, faldones laterales o un alerón trasero más grande. Las llantas pueden ser de 19 pulgadas (de serie viene con 18) y las pinzas de freno pueden ir coloreadas en rojo. En el habitáculo, lo más destacado es la inclusión de los asientos tipo bacquet firmados por Recaro que, si son igual de sobresalientes que los del Fiesta ST, sus ocupantes irán perfectamente encajados en ellos. El conjunto lo completan los pedales deportivos en aluminio, material que también está presente en el pomo del cambio.
Dado que el Focus ST llegará al mercado durante este verano, Ford aún no ha anunciado sus precios. Por tanto estaremos pendientes de cualquier información relacionada con ellos y, sobre todo, con la posibilidad de que la firma del óvalo nos empiece a mostrar un Focus RS.
