Saltar al contenido principal
En estos momentos, los servicios que ofrece AutoScout24 están limitados por trabajos de mantenimiento. Esto afecta a algunas funciones, como el contacto con los vendedores, el inicio de sesión o la gestión de los vehículos para la venta.

Primer contacto: Porsche Boxster S PDK – Un auténtico purasangre

Siempre a la sombra del legendario e inalcanzable «nueveonce», el Boxster ha llevado durante largo tiempo una vida mediocre, calificado a menudo de Porsche para mujeres o de MX-5 de lujo a modo de mofa y menospreciado por los discípulos adinerados de la casa alemana.

Sin embargo, esta situación podría cambiar con la tercera generación, ya que el Boxster se presenta con una nueva y explosiva carrocería y promete divertir tanto como el 911 pero a mitad de precio. El Boxster ha conseguido convertirse en lo que nunca fue: un automóvil de ensueño capaz de robarle protagonismo a la mismísima leyenda de la marca. Su línea exterior redefinida le permite destacar con respecto a su antecesor marcando una nueva dimensión estética, mientras su carrocería discurre muy plana y pegada a un chasis que aloja un motor central y propone un estilo definido para una imagen característica que irradia energía a raudales.

Sin embargo, el Boxster también echa mano de la historia de la casa Porsche, por ejemplo en el caso de sus faros. Estos (pseudo)rectángulos colocados en posición casi vertical con unidades ópticas dispuestas una encima de la otra son un guiño a los coches de carreras 906 a 917 fabricados durante los años sesenta y setenta. Sin embargo, su nueva carrocería más dinámica también presenta reminiscencias de otros iconos de la marca como el 918 híbrido o el Carreta GT V10. Y a esto cabe añadir algunas innovaciones estéticas como el alerón integrado en la zaga y cuyo borde de ataque se funde en uno con los grupos ópticos traseros.

Más masculino

Sin embargo, lo más destacable es que la composición del conjunto otorga al Boxster un semblante más atlético, claramente maduro, musculado y mucho más dinámico que el de su predecesor. Esto se debe, por ejemplo, a su morro extremadamente plano, sus voladizos recortados, la excelente relación entre la altura y la anchura o a unos enormes pasos de rueda capaces de alojar ruedas de hasta 20 pulgadas. Como suele ocurrir con casi todos los roadster, la mejor estampa del Boxster la encontramos con el techo abierto.

Y así fue como realizamos nuestra primera prueba de conducción con temperaturas primaverales por las cercanías de la ciudad de Niza. La capota del nuevo Boxster es íntegramente eléctrica y su transición hacia la parte trasera de la carrocería tras pulsar el botón de accionamiento es fluida y precisa aproximadamente 9 segundos a velocidades no superiores a 50 km/h, tras lo cual se guarda de forma compacta detrás de ambos asientos. Si además dejamos las ventanillas levantadas, entonces lo único que percibiremos será una ligera y agradable brisa, que tampoco llegará nunca a ser molesta –al menos por debajo de los 100 km/h– gracias a un pequeño panel cortavientos (unos 300 euros) que se instala fácilmente detrás de los reposacabezas.

Espacio para grandes bultos, pero pocos huecos portaobjetos

Y gracias a su generosa oferta de espacio, en el nuevo Boxster también se puede viajar cómodamente. Sí, has oído bien, el Boxster sirve también para realizar desplazamientos largos, ya que nuestras dos maletas de fin de semana cupieron sin problemas en ambos maleteros (150 + 130 litros) situados tanto delante como detrás del conjunto. Sin embargo, los ocupantes tendrán más problemas para guardar chaquetas, jerséis o cualquier otro objeto de menor tamaño dentro de la cédula de los ocupantes, ya que ésta carece prácticamente de compartimentos de almacenamiento.

A la vista de esta problemática uno se acuerda con nostalgia de los nueveonce que con su pequeño banco trasero y sus dos asientos de emergencia conforman un superdeportivo más apto para un uso diario. Por lo demás, los dos ocupantes del nuevo Boxster encontrarán rápidamente la posición óptima para viajar cómoda y relajadamente sobre sus asientos deportivos de construcción ligera. Además, el Boxster se puede equipar con multitud de pequeños detalles, lo que permite a su inigualable interior transmitir una exquisita sensación de bienestar y máxima calidad hasta ahora reservada al 911.

Extraordinariamente deportivo

Sin embargo, aún más fascinante que su lujo interior es la experiencia de conducción. Por carreteras sinuosas el nuevo Boxster hace que olvidemos rápidamente al 911, ya que gracias a la reducción de peso (1.350 kg), a una inyección de potencia y a una carrocería más rígida Porsche ha logrado superar el ya de por sí elevado dinamismo de su predecesor. En lo que respecta a la versión S en combinación con el cambio de doble embrague PDK, los datos de referencia son los siguientes: 315 CV, 360 Nm, 4,8 segundos de 0 a 100 km y una velocidad máxima de 277 km/h (con cambio manual incluso 279 km/h). Y la cosa no queda ahí, ya que Porsche es capaz de hacernos la boca agua con otro dato. Según afirma el fabricante, parece que este bólido de motor central logra recorrer la variante norte del antiguo Nürburgring en tan solo 7:58 minutos.

Y pese a que su aspecto es mucho más musculado, en el apartado del consumo de combustible se muestra bastante comedido, al menos en teoría. En parte gracias al sistema automático de parada y arranque y a la inyección directa de gasolina, la versión S consume solo 8,0 litros, aunque hay que tener en cuenta que en la práctica también es factible duplicar o triplicar esta cifra.

Mecánica de precisión

Sin lugar a dudas, el nuevo Boxster es capaz de dibujar curvas imposibles sin que al conductor se le borre la sonrisa de la cara. La tracción trasera, una dirección electromecánica muy precisa, directa y libre de cualquier cambio de dirección provocado por el exceso de par motor sobre el eje motriz, una distribución equilibrada del peso sobre los ejes y una carrocería abierta a prueba de torsión convierten al pequeño de los Porsche en una máquina sumamente precisa. Esto no es solo algo bueno, sino que para el nivel de precio y prestaciones en el que se mueve el conjunto tiene visos de convertirse en todo un referente.

El gasolina de seis cilindros y 3,4 litros que gira animadamente detrás de las cabezas de los ocupantes proporciona una propulsión sin igual, pues se trata de un propulsor al que le gusta trabajar a regímenes elevados y que hasta casi el límite de las 8.000 vueltas no parece sufrir en absoluto. No solo su empuje, sino que también la acústica transmite a los pasajeros la sensación de estar sentados en una imponente máquina de hacer kilómetros. Su sonido corresponde en gran medida a la más que conocida y por todos deseada acústica Porsche, aunque al conducir de forma más relajada el ruido se mantiene en un discreto segundo plano. Toda una experiencia escuchar el resuello de su fantástico motor al reducir dos o tres marchas de golpe antes de entrar en una curva muy cerrada.

Sin embargo ahí no queda la cosa, ya a partir de ese momento el Boxster ofrece una dosis adicional de dinámica. Al acelerar con ímpetu para salir de la curva es cuando el motor gira más allá de las 4.000 revoluciones y parece estallar al pedirle un poco más, cuando el coche continúa acatando sin rechistar las órdenes del conductor, cuando se mete aún más en la curva como atraído por una extraña fuerza y cuando pese a tener todo en contra, mantiene el rumbo como guiado por un imán. Durante todo este tiempo el conductor no pierde la tranquilidad, incluso cuando la zaga hace amago de ir por su cuenta. Pero si llegamos a este punto tan extremo lo único que debemos hacer es levantar ligeramente el pie del acelerador y soltar un poco el volante para que roadster pueda seguir trazando la curva de forma impecable. Y pese a tratarse de una máquina perfectamente equipada para las aplicaciones más extremas, nuestra unidad de prueba exhibía una suspensión sumamente cómoda que nunca llegó a mostrar una rigidez exagerada.

El precio justo

Parece increíble, pero teniendo en cuenta el enorme placer de conducción que proporciona este bólido, Porsche ha preferido mantener los pies en el suelo y exigir unos 52.800 euros para entrar a formar parte del universo Boxster.  De esta forma, el modelo de Zuffenhausen se sitúa casi al mismo nivel que las variantes de motorización comparable del Audi TT, BMW Z4 o Mercedes SLK. En comparación con el 911 descapotable, cuyo preciso básico supera los 100.000 euros, podemos decir que el nuevo Boxster es toda una ganga.

El Boxster básico –es decir, sin el apellido S– está equipado con un propulsor de 2,7 litros que no pasa de desarrollar 265 CV y generar un par motor de 280 Nm. Si bien la versión básica no resulta lenta con estas prestaciones, el Boxster S de 67.000 euros es el que provoca sin lugar a dudas una mayor fascinación.

Por otro lado, la versión básica del Boxster dispone de un equipamiento nada desdeñable que incluye asientos deportivos con regulación eléctrica del respaldo y tapizados en semipiel y piel alcántara, techo completamente eléctrico, freno de estacionamiento eléctrico, elevalunas eléctricos, sistema de audio con pantalla táctil de 7 pulgadas, cierre centralizado con mando a distancia, una enorme pantalla a color situada en el cuadro de instrumentos e incluso ruedas de 18 pulgadas. En realidad esto podría bastar, pero lista de precios de casi 80 páginas incluye multitud de atractivos extras que invitan al futuro propietario a soñar. Sin embargo, con tan solo marcar un par de opciones el precio puede alcanzar rápidamente los cinco dígitos.

Conclusión

¡Eureka! Por fin la tercera generación del Boxster ha dado en el clavo y se presenta con un aspecto más individual, seguro de sí mismo, soberbio y ya en su versión básica suficientemente bien equipado. Este elegante y llamativo roadster ofrece una verdadera sensación Porsche sin llegar a las astronómicas cifras del 911. En realidad, en términos económicos el Boxster se mueve al mismo nivel que sus competidores alemanes de clase premium – TT, SLK y Z4–, unidades a las que, dicho sea de paso, supera con creces en lo que a dinámica de conducción se refiere.

¿Preparado para lo siguiente?

Compartir el artículo

WhatsAppEmailFacebookCopiar link

Todos los artículos

tesla-cybertruck-2023-2

Un cliente de Cybertruck, en la lista negra de Tesla

Noticias
Los Márquez estrenan coche "de empresa"

Los Márquez estrenan coche "de empresa"

Noticias
Volkswagen ID.3 e ID.7 GTX: los 'GTI' del futuro

Volkswagen ID.3 e ID.7 GTX: los 'GTI' del futuro

Noticias
Mostrar más