Para comprobarlo, hemos tenido la oportunidad de realizar alrededor de 130 kilómetros a bordo del 530d con carrocería de tres volúmenes, y otros tantos con el 535i en su variante GT. Ambos recorridos se desarrollaron por los alrededores de Múnich (Alemania) y comprendían, fundamentalmente, carreteras secundarias que atravesaban pequeñas poblaciones, con algunos tramos de autopista.
A nivel estético, las modificaciones son muy ligeras y afectan a la gama de colores (con cuatro nuevos tonos), la parrilla delantera, los parachoques, los retrovisores (que integran las luces de dirección), las llantas y los grupos ópticos. Los faros de xenón son ahora de serie, con proyectores LED opcionales, incluso para las luces anti-niebla.
También hay cambios en la parte mecánica. De entrada, todos los motores son ahora Euro 6, con lo que BMW se anticipa un año a la entrada en vigor de la nueva normativa de emisiones. Además, aparece en la gama una nueva versión básica (518d), equipada con un motor diésel de 143 CV, que está disponible tanto para la carrocería berlina como para el familiar. Aparte de esto, se han optimizado las medidas para ahorrar combustible, como el aprovechamiento de las frenadas para cargar la batería, el uso de mapas de acelerador ahorradores o el desacoplamiento de la mecánica cuando levantamos el pie del acelerador, medidas ambas disponibles en el modo de conducción Eco Pro.
Asimismo, nos ha llamado la atención que la versión híbrida tiene en cuenta la orografía de la ruta previamente programada en el navegador para calcular la reserva de la batería y optimizar, así, los consumos. En marcha, hay que diferenciar entre la berlina y el Gran Turismo. El segundo tiene una dirección de tacto muy eléctrico, que transmite al volante de forma muy amortiguada las sensaciones de lo que ocurre entre las ruedas y el asfalto. La berlina ofrece un tacto más directo, aunque sigue estando lejos de las sensaciones más intensas que ofrecían las anteriores generaciones del vehículo.
Los precios del renovado Serie 5 arrancan en 41.300 euros (518d berlina). El familiar más asequible es el 518d Touring, que cuesta 45.800 euros, mientras que la gama Gran Turismo está disponible desde 52.100 euros, que es el precio del 520d GT. La familia se cierra por arriba con la berlina deportiva M5, que cuesta 120.600 euros.
