Saltar al contenido principal
En estos momentos, los servicios que ofrece AutoScout24 están limitados por trabajos de mantenimiento. Esto afecta a algunas funciones, como el contacto con los vendedores, el inicio de sesión o la gestión de los vehículos para la venta.

Prueba: Mazda 5 1.8 Style – Deseo y necesidad

La necesidad de espacio es prioritaria en el segmento de los monovolumenes y suele acabar tristemente con los deseos del conductor por conseguir una conducción de calidad.

Por suerte, el Mazda 5 es una opción excelente en este sentido, ya que aporta ambas cualidades sin salirse del precio establecido entre sus competidores... Hagamos la prueba. Quiero y necesito un monovolumen en el mercado con siete plazas reales y cómodas, un motor potente y un chasis a la perfección, equipamiento abundante y tecnológico, amplitud para el piloto, mucho espacio de carga y que permita recorrer cientos de kilómetros en un día sin acusar el cansancio. Ah, y que además su estética sea inusual y tan atractiva como la de un turismo.

Cualquiera que haya realizado esta exigente búsqueda tan sólo podría salvar de la criba al Mercedes-Benz Clase R, aunque casi por seguro no sería capaz de pagar los casi 60.000 euros que cuesta y manejar con soltura sus cinco metros de eslora. Así que es mejor ser realistas y observar las numerosas opciones que se barajan en este reñido segmento enfocado a las familias, carrocerías más pequeñas en las que se pretende ofrecer de todo al mejor precio asumiendo casi siempre las mismas pegas. Generalmente la suspensión (demasiado blanda y entregada a la comodidad) y el diseño (donde las florituras no vienen mucho a cuento) terminan por ser lo que no acaba de convencer a los conductores de este tipo de coches.

Estética “Nagare”

Sin embargo el Mazda 5 podría representar una excepción en este sentido. Con los cambios practicados sobre el frontal, el Mazda 5 ha quedado mucho más próximo a los últimos modelos estrenados, como el Mazda 3 o el Mazda 6, haciendo un poco más homogénea la gama. Sin embargo, tiene detalles estéticos que le hacen único, como los nervios ondulados que recorren prácticamente todo el lateral y el raíl por el que deslizan las puertas correderas, que no suelen ser nada fáciles de integrar en el diseño. Según los últimos diseños y estudios presentados por la marca, parece que este tipo de estética, que se desarrolla bajo el concepto de fluidez “Nagare”, será la que marque la apariencia de los próximos modelos de Mazda.

A esto también hay que sumar que la estética del frontal es mucho más potente, que los faros han quedado mucho más afilados dejando una aspecto más aerodinámico y que la percepción de “ventana única” a lo largo de los laterales restará cierta claustrofobia a sus ocupantes. Todo esto suma a favor del japonés.

Sobre el sistema de apertura lateral de las puertas traseras, ya comentamos que Mazda había trabajado para aligerarlas y que no fuera tan costoso deslizarlas en la operación manual (en algunas versiones se puede tener un accionamiento automático). Lamentablemente, esto no figura como opción en las versiones de acceso (Active y Style), con lo que para disfrutar de la comodidad y seguridad que ofrecen debemos gastar los 22.290 euros de la versión 2.0 DISI Luxury de 150 cv.

Mejor como seis plazas

En el interior no falta nada de lo que se le puede pedir a un buen monovolumen. Hay huecos por todas partes para dejar cosas, buen espacio para dos personas en la segunda fila de asientos (que pueden deslizarse de forma longitudinal), y una tercera fila que cumple correctamente con el transporte de dos personas de forma ocasional y no para largos recorridos.

El aumento de tamaño de la carrocería en esta generación ha dejado algo más de espacio, que se nota sobre todo en el hueco para las piernas de la fila intermedia. No obstante, una pega a tener en cuenta es que el asiento central de la segunda fila es más bien decorativo, no hay espacio suficiente para albergar a una persona adulta, así que lo mejor es plegarlo lateralmente (como en ésta foto) y dejar un pequeño pasillo para acceder a la tercera fila de asientos.

Aunque esto es una cuestión de gustos, en el puesto de conducción se ha apostado por la sencillez de la instrumentación, con pocos y grandes mandos giratorios, en lugar de atiborrar la parte trasera del volante y la consola de pequeños controles que en realidad podrían quedar agrupados perfectamente. El aspecto de los materiales es bastante sobrio, aunque se han adornado en esta generación con algunos cromados aumentando la sensación de calidad y prometiendo buena resistencia al paso del tiempo.

Por debajo en espacio de carga

Uno de los apartados donde el Mazda no sobresale por encima de la competencia es el espacio de carga. Con 426 litros de capacidad inicial, se ve superado por el Citroën C4 Grand Picasso (576 litros) y arrollado por el Opel Zafira (645 litros), aunque es cierto que éstos han sido medidos con el espacio de la rueda de repuesto que no incluyen.

Con la rueda de repuesto bajo el piso del Mazda 5, los 426 litros dan para mucho si van a viajar cinco personas o menos de forma habitual. Los cinco asientos traseros pueden abatirse, dejando una superficie horizontal sin resaltos a través de la cual es muy cómodo deslizar y tirar de los bultos. Así, la capacidad máxima llega a multiplicarse por tres.

Conducción

Superadas las dudas en cuanto a tamaño y capacidad de carga, toca saber cómo se desenvuelve este monovolumen en carretera con el motor de gasolina más básico. Los más perfeccionistas a la hora de elegir un coche encontrarán rápidamente como virtudes varios aspectos: el primero es que el Mazda 5, desde su versión más accesible, cuenta con uno de los chasis mejor reglados de este segmento, ofreciendo el característico tacto duro de la suspensión y un matiz deportivo tanto de la dirección como del cambio de seis marchas (recorridos cortos y rápidos). En este sentido, puede que sea el MPV con más sensación de turismo hoy en día en el mercado. Otro de los puntos fuertes es la comodidad, debido a que los asientos sujetan correctamente, se regulan con facilidad y no dejan los hombros totalmente libres como en la mayoría de modelos del segmento. Es un modelo totalmente recomendable si se van a hacer muchos kilómetros, ya que no se acusa apenas el cansancio.

Datos técnicos
Marca y modelo Mazda 5
Versión 1.8 Style
Especificaciones
Longitud/anchura/altura (mm) 4585 / 1750 / 1615
Distancia entre ejes  (mm) 2.750
Diámetro de giro (m) 10,6
Peso (kg) 1.470
Volumen del maletero (l) 1485 (2) / 426 (5) / 112 (7)
Neumáticos 205/55 R16
Motor
Cilindrada (cc) 1798 / 4 en línea
Potencia (cv) 115
Par máximo (Nm/rpm) 165 / 4000
Tracción Delantera
Transmisión Manual, 6 velocidades
Consumo
Combustible Gasolina
Urbano/Carretera/Combinado (l/100km) 9,3 / 6 / 7,2
Emisiones CO2 (gr/km) 168
Consumo durante test (l/100km) 7,9
Características
Aceleración 0-100 km/h (s) 12,8
Recuperación 80-100 km/h (s) en 4ª
Capacidad depósito (l) 60
Velocidad máxima 182
Precio (con descuento a la fecha)
Euros 21.290
Equipamiento extra
Más datosMenos datos

Por otra parte, la progresión del motor 1.8 de 115 cv sigue siendo igual de buena o mejor que en el modelo anterior ya que la aerodinámica se ha mejorado ligeramente. Es un propulsor sin grandes aspiraciones pero muy correcto en cuanto a aceleración y recuperaciones si no vamos hasta arriba de equipaje y con cinco ocupantes a bordo. Si ésta fuera la condición habitual, sin duda habría que decantarse por el motor 2.0 DISI de 150 cv que, por tan sólo 1.000 euros más, nos da los añadidos de llegar al equipamiento Luxury y ahorrarnos casi medio litro en el registro de consumo medio. La explicación es que éste es un motor mucho más avanzado y contundente, que emite menos CO2 a la atmósfera gracias al sistema Start-Stop y a la inyección directa de gasolina, haciéndolo más refinado y sobre todo más ahorrador.

Esto lo decimos precisamente el dato de consumo del 115 cv no es lo que más favorezca a esta motorización de acceso. Nuestro ordenador de a bordo, incluido de serie en esta versión Style, reflejó un dato de consumo de prácticamente 8 litros a los cien, y eso que buena parte del trayecto diario se realizaba por autovía. En ciudad podemos alcanzar con facilidad medias de consumo superiores a los once litros.

Equipamiento

Aunque no podamos disfrutar de las puertas laterales con apertura eléctrica (que es junto con la modularidad de los asientos lo que más caracteriza a este coche, el acabado Style ya ofrece un equipamiento bastante completo. A cambio de los 2.000 euros de diferencia con respecto a la versión de acceso Active (19.290 euros) ya se incluye el volante multifunción, las luces antiniebla, ordenador de a bordo y controlo de velocidad, climatizador, automatismo de lluvia y acabado en cuero para el pomo y el volante. Sin embargo, pensar en un bluetooth, unos buenos faros de xenón o un control de presión para los neumáticos sigue siendo imposible para esta motorización.

ModeloLongitudMotorConsumoPrecio

        	Mazda 5 (Style)4,58 m1.8 115 cv7,221.290  			

        	Renault Grand Scenic (Dynamique)4,56 m1.4 Tce 130 cv7,421.500  			

        	Toyota Verso (Active)4,40 m1.6 VVT-i 132 cv6,719.450  			

        	Opel Zafira (Cosmo)4,47 m1.8 140 cv7,221.305  			

Resumen

El Mazda 5 es una opción muy recomendable para aquellos conductores que busquen buena modularidad en un monovolumen, un espacio de carga aceptable y un medio de transporte cómodo para seis personas, no siete. Es preferible hacerse con él si se da más importancia a la calidad de conducción, donde es realmente bueno, que a otros factores como la cantidad de espacio en el maletero (donde muchos de sus rivales, por ejemplo el Opel Zafira, parecen más aprovechables). Po último, es una lástima que tanto la apertura de puertas eléctrica como el Start&Stop estrenado en el nuevo motor de gasolina no estén disponibles en esta motorización de acceso, ni siquiera como algo opcional.  

¿Preparado para lo siguiente?

Compartir el artículo

WhatsAppEmailFacebookCopiar link

Todos los artículos

Prueba Mazda CX60 PHEV 328 CV 4WD: un gran coche (y vendrá en diésel)

VIDEO | Prueba Mazda CX60 PHEV 328 CV 4WD: un gran coche (y vendrá en diésel)

Pruebas · Mazda
MazdaCX-60 Takumi Germany still -(10)

Primer contacto con el nuevo Mazda CX-60 PHEV 2022

Pruebas · Mazda
Prueba Mazda MX-5 2.0 184 CV: un seductor biplaza con (ahora) alma deportiva

VÍDEO| Prueba Mazda MX-5 2.0 184 CV: un seductor biplaza con (ahora) alma deportiva

Pruebas · Mazda
Mostrar más